jueves, noviembre 08, 2007

C.S.I. Ciudad del Vaticano

A Juan Calvino, teólogo protestante y dictador de facto en Ginebra, no le gustaban las reliquias. No es sólo que su culto le pareciera rayano en la idolatría. Además, consideraba que su comercio dejaba abierto el camino a las más descaradas estafas. En una frase célebre comentó: "Hay suficientes fragmentos de la Verdadera Cruz como para llenar un barco".

Uno, desconfiado con la naturaleza humana y su habitual trapacería tiende a pensar que el tipo tuviera razón, pero lo más curioso del caso es que Calvino se equivocaba. Un desocupado erudito francés del siglo XIX, Rohault de Fleury, se dedicó a recorrerse toda Europa pesando, midiendo e inventariando los fragmentos. El sorprendente resultado fue que el volumen total tan sólo ascendía a 0,004 metros cúbicos de madera. Es más, la mayor parte de los fragmentos eran del mismo tipo y similar antigüedad aparente. Se conoce que cuando los Cruzados saquearon Constantinopla, donde se conservaba metro y medio de supuesta Cruz, eran muchos los saqueadores y siguieron el viejo principio de una astilla para cada uno y el que se quede la más corta limpia después. De dónde sacaran el madero los bizantinos ya es harina de otro costal.

Pero eso era en el Medievo. La Iglesia Católica actual prefiere atajar las discusiones en el inicio y no correr riesgos de estafa. No hace ni quince días que subieron a los altares a mi tío-bisabuelo, y ya le han tomado muestras de ADN a mi abuela para verificar si la camisa ensangrentada que mis parientes custodian es la que el meritorio varón llevaba puesta cuando le abrieron el cráneo a martillazos el 9 de agosto de 1936.


Espero que dé positivo, la verdad. Con lo que le hicieron pasar al hombre por el solo hecho de ser sacerdote, lo mínimo que merece es un relicario en condiciones.

Además, después de setenta años aplazando la colada las manchas no van a salir sin frotar.

11 comentarios:

Ángel dijo...

Mira, alguien de la familia a quien encomendarte en tus labores de opositor.

Yo dejaba ya de estudiar, total...

Esther Hhhh dijo...

Uff.. Pero que bestias. Hay cosas que nunca lograré entender. Una de ellas es ese supuesto placer que reside en hacer daño a otro. Esta vez, capi, no tengo ni ganas de sonreír, disculpadme.

Besitos

blondie dijo...

Estoy contigo Esther, aunque esos humanos son peores que las bestias. Los animales matan para alimentarse, sólo los humanos lo hacen por razones como el odio o el dinero, y además, con crueldad.

Anónimo dijo...

Y además los que lo hicieron , lo hicieron en nombre de la Libertad.

qelena dijo...

pero si eres famoso!!!

Anónimo dijo...

Capitán: aunque le leo asíduamente escribo poco. Esta vez quiero decirle que, al igual que esther, no tengo ganas de sonreír, puesto que me da mucha rabia que determinados políticos quieran hacernos creer que solamente los muertos de un color eran los mártires, cuando los mártires son los que sufren por sus ideas, sean de un lado o del otro. Dios quiera que España no vea algo así nunca más.

Alfor dijo...

Oiga, pues enhorabuena por la parte que le toca.

Achab dijo...

Ángel:

No creo que el tío Paco me vaya a ayudar si no estudio, que el hombre se pasó media vida estudiando en Roma y acumulando sobresalientes varios.

Esther, Bere, Blondie:

Entiendo que les resulte un tanto triste, pero yo le debía unas líneas al tío Paco y se las pagué ayer. A su hermana Sebastiana, que tenía los mismos redaños, era monja de clausura y fue quien recogió la camisa le sigo debiendo una entrada.

Roland:

Eso dicen, eso dicen.

Elenita:

¿Yo? ¿Por qué?

Alfor:

Gracias. Si encuentra por la estepa una capillita abandonada que necesite un beato patrón le presto al tío Paco, que queda muy guapo.

Hans dijo...

Iba a hacer un comentario, algo acerca de la muy fascista costumbre de empeñarse en no morir bajo los justificadísimos hostiones de la Benéfica Revolución Social, o acerca de lo injustificado-y-facha de exigir más esfuerzo obrero para eliminar a otro faccioso en defensa de las libertades públicas, o así, pero francamente se me han pasado las ganas.
Me parece formidable que pagues esa deuda, por cierto.

Anónimo dijo...

Sí, parece que cada vez que se matan un@s contra otr@s cada bando procura sumar más y mejores mártires. Y luego el que gana, además, se permite más revancha.
Pero eso me suena de ahora y de siempre, de aquí y del resto del espacio conocido.
De las cosas buenas que tiene mi mundo es que les llamamos mitos y la sangre no mancha ni los golpes duelen en el cuerpo porque son virtuales. Otra cosa es la pena y el desconsuelo....

Bereni-C dijo...

Perdón por el retraso en los comentarios pero acabo de leer el post y... ¿Bere? Ain Achab que yo no había dicho na. Yo soy la del manojo de ros... digo, la del avatar de la oveja.

En una guerra sólo hay perdedores, nos cuenten la Historia como nos la cuenten. Durante años nos han contado que los mártires fueron unos, ahora toca que son los otros. Cada familia cuenta la feria como la vivió (en mi caso, tb tengo "mártires" en la familia y justo del lado contrario). Todos cometieron animaladas y en ningún caso y bajo ningún nombre (llámase Patria, Libertad, Orden o lo que sea) está justificado. También lo que pasa es que visto desde la distancia todo parece muy claro y es una cosa; vivir sumergido en un ambiente concreto y vivir el odio, es otra.