jueves, septiembre 03, 2009

Saqueadores de tumbas

El paso del tiempo ha sido muy cruel con algunas profesiones tradicionales. ¿Quién daría hoy trabajo a un carbonero, a un herrador, a un arriero? ¿Dónde hallar un calderero, un cómitre o un lañador?

Especialmente doloroso es el caso de los ladrones de tumbas. En la antigüedad, el negocio de expoliar fiambres podía ser muy lucrativo. Los poderosos de la Tierra se inhumaban con toda suerte de riquezas con la fútil esperanza de perpetuar su imperio en la otra vida. El saqueador se arriesgaba a una muerte espantosa si le pillaban con las manos en la pirámide pero, al menos, se jugaba el pescuezo por un buen montón de dinero.

Pasó el tiempo y las creencias cambiaron. Con el advenimiento del cristianismo, la humildad multiplicó su cotización en el mercado de la salvación eterna y la inhumación en hábito de cartujo pasó a ser uso corriente en los sepelios de postín. El negocio del saqueo se fue al garete.


Menos mal que el difunto Michael Jackson era un hombre chapado a la antigua y sus deudos han optado por inhumarle en un cómodo y vistoso ataud de de oro.

¡Manos a las palas, muchachos! Es la mejor oportunidad desde que Tutankamón hincó el pico.

5 comentarios:

YoMisma dijo...

Telita, telita...

Y esto estaba en sus ultimas voluntades o es que no puede enterrar en otra cosa a un rey?¿?

Saludos,
YoMisma

Er-Murazor dijo...

Este hombre, siempre mirando por los demás...

Anónimo dijo...

¡Ay, la mierda! Yo sabía que era un genio, que estaba tocao del ala, que había muerto... ¡¡Pero no que quería ser enterrado con un ataúd de pokero!!

Esto es una exclusiva: Michael Jackson pasará a la Historia como '$hUr Cole€gAa €r M1gUeEeEe'.

He dicho.

Achab dijo...

Yo Misma:

Será que queda mejor en vídeo y luego se vend emejor.

Er-Murazor:

Un santo, todo un santo.

Grénmabar:

Parece un mechero grande, pero cómodo también.

Esther Hhhh dijo...

Sospecho que lo querían quemar, Capi... Ataud incluído.

Besitos