La verdad es que ahora, a un par de días vista, me siento un poco avergonzado de mi exabrupto melodramático del jueves. Se supone que uno es un curtido marino y no hace esas cosas con lo cual, mi instinto natural es hacerme el distraído y contarles una historia de chinos. De todos modos, como no es descartable que alguno de ustedes haya sido tan imprudente de cogerme cariño y preocuparse por mi persona les pongo al día: el océano está tranquilo, no ha habido víctimas mortales, ningún animal -con la posible excepción de una libélula rosa- ha sufrido daños irreparables en el proceso y, de momento, no se aceptan ofertas de primas casaderas.
Ahora para distraer su atención y, de paso, demostrar que lo de exagerar no es patrimonio personal mío les contaré una bonita historia de exageraciones añejas.
En los primeros años del cristianismo, el proceso de canonización no estaba demasiado desarrollado y cada diócesis subía a los altares a quien mejor le convenía. Luego con el tiempo, el orden se impuso... a veces. Otras veces fue peor. Por ejemplo, en Colonia, Alemania, se alzaba, desde el siglo sexto, una iglesia dedicada a Santa Úrsula y sus compañeras. Sin embargo, pasados unos cuantos años nadie se acordaba de quiénes fueron aquellas señoras ni de por qué eran santas. Unos cuantos eruditos se pusieron a investigar y hallaron los documentos de fundación, escritos en un informal latín tardío cuajado de abreviaturas. Ahí residió el problema, en las abreviaturas, como quiera que los papelujos narraban que los pérfidos romanos dieron muerte a la joven Úrsula y a otras XI.MV. el lector infirió, que los paganos habían liquidado 11.ooo (XI.M) vírgenes en lugar de la más razonable cantidad de 11 (XI) mártires (M) vírgenes (V). En cualquier caso, desde entonces se celebra -aunque no mucho- la festividad de Santa Úrsula y las Once Mil Vírgenes.
Claro que, lo mismo, lo que ocurre es que los de Colonia no son de ciencias. En la catedral guardan las reliquias de los Reyes Magos y, si cuentas las cabezas, te salen cuatro.
sábado, julio 28, 2007
Exagerando
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
9 comentarios:
Ay, pobechito el rudo marinero, que no le gusta llorar...
Jódete.
Enga, otro besito y celebramos que ya pasó. ¿Te bailo la danza del vientre con ese velo, antes de que lo uses para colgarme del ventilador?
Como usted dice, porque no eran de Ciencias. Porque si llegan a ser de la LOGSE celebrarían la festividad de Santa Úrsula y Santa Ximv.
Supongo que vd. conoce la obra de Jardiel Poncela, ¿ Pero hubo alguna vez 11.000 vírgenes ? Si no es así se la recomiendo vivamente, al igual que casi toda la obra del insigne madrileño, con el que, por cierto, comparte sarcástico enfoque vital.
Ya me parecía a mí que faltaba un asiático entre los Reyes Magos de Oriente. Ahora todo encaja...
Pues yo me había dedicado a la busca y captura de mi viejo móvil, que es donde almaceno su número de teléfono, pero en plena mudanza es complicadillo :(
Y hago notar que no había mencionado opciones de emparejamiento :*
Apoyo la moción del asiático. O eso, o se equivocaron con algún paje...
Me alegro de que haya pasado ya ;)
Eride:
¿Estrangular? Yo simepre he preferido el derramamiento de sangre, pero vale.
Suri Kata:
Que sería una gran fiesta, sin duda.
Enano:
Conozco, conozco. Gran tipo el tal Jardiel, por cierto.
Guandarrrr:
O un esquimal.
Cattz:
Yo pensaba que estarías más bien a la caza y captura de tu prima, pero y aveo que no.
Tamaruca:
Yo creo que pillaron una oferta.
Te hemos cogido afecto, cierto, pero como vuelvas a escribir 'Haya' del verbo haber con 'll', empezaremos a planteárnoslo. por Dios...
En cuanto a lo de las once mil vírgenes iba a decirlo, pero me lo han chafao.
Ains Capi, capi... Lo de exagerar, además de otras cosas menos bonitas, es atributo general de los que, como vos, sufris la falta de un cuarto de cromosoma. (Ya que hablamos de ciencias, es una bonita forma de decir "hombres" ¿no creeis?).
Estoy preparando un funeral en homenaje a esa sufrida libélula rosa, que tras hermosos días de revoloteo, ha caído en esta insigne batalla, sniff.. Ya os mando la invitación.
En cuanto a las cabezas de los reyes... Bueno, eso es porque probablemente había un rey de repuesto, por si alguno se perdía con eso de seguir una estrella, que ya sabeis, no es tarea fácil, son tan... fugaces....
Besitosss
Publicar un comentario