Anoche, mi rubita de cabecera se fue de copas al hipódromo y volvió a casa con un resfriado de caballo.
La vida tiene muy mala intención, pero su lógica es impecable.
Tienes una capa de pluma de kakapo y aún te quejas del frío. (Proverbio maorí)
Anoche, mi rubita de cabecera se fue de copas al hipódromo y volvió a casa con un resfriado de caballo.
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8 comentarios:
Pobrecita mía, eso es porque no me la habéis cuidado como Dios manda, aaaaaaish... Mandadle besos y mimos de mi parte... A mí que hay un virus suelto por Madrid, yo volví de allí con otro resfriado de equino que ni os cuento... Y eso que no estuve en el hipódromo.
Besitos
Jo
Menos mal que no agarró un catarro de yegua.
Bueno, tuvo suerte. Teniendo en cuenta que el sitio está por la cuesta de las perdices, podía haber pillado una gripe aviar.
Ah, los ciclistas en porretas se han ido a Valladolid.
Hmmm... impecable, sí. Responde, además, al modelo jaca?
Esther:
Delicadas...
Koala:
Koala pocho, koala pocho...
Bwana:
Pues ahora que lo dice...
Suri:
Para eso tienen las bicis.
Fräulein:
No responderé a eso sin la presencia de mi abogado.
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