Hay quien se patea media África para obtener una piel de león, jirafa o leopardo con la que adornar su casa. Yo prefiero dedicar mis esfuerzos a la caza menor.
Se me da muy bien, además. Esta espléndida piel de señorita la cacé ayer en las inmediaciones de la calle Velazquez de Madrid.
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Si su propietaria no me la reclama en tres días procederé a exhibirla sobre la chimenea del salón.
lunes, marzo 29, 2010
Caza menor
Categorías: amigos conocidos y otra fauna perniciosa, bestiario, moda
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6 comentarios:
¿Qué habéis hecho con la señorita en cuestión? Confesad, malandrin!!!
Besitos
Por cierto, mi querido Capi, ¿habéis cambiado el nombre del blog, y eso?? En fin, para mi, ya sabéis, seguis siendo EL CAPITÁN ACHAB (de agua dulce y con barco anclado en el puerto de Navacerrada, confesión vuestra, que conste)
Besitos
Me parece un trofeo espectacular, mucho mejor que la piel de un pobre leopardo.
Lo malo de la caza menor es no saber a qué animal pertenece la piel. Quizás sea de un señorito, no se puede asegurar nada.
Esther:
Llevarla a casa. Se dejó la piel en el coche.
Esther:
Yo soy yo, eso siempre.
Bwana:
Dónde va a parar.
HVN:
Es de señorita, que yo estoy muy puesto en el despelleje.
Pues eso es más preocupante... ¿Se la dejó en el coche o la perdió en el coche? Y si la perdió, ¿fue porque vos tomásteis partido, o se le cayó de forma misteriosa, tal vez por el cambio de pelo primaveral?
Besitosssss
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