La mitad de la buena cocina es tener imaginación. La otra mitad consiste en hacer croquetas.
Ayer vinieron a comer a casa mi hermano y su mujer. Como es su deliciosa y ejemplar costumbre, llegaron con el postre incorporado. Para la ocasión, mi cuñada se había esmerado en aportar al condumio unos suculentos buñuelos caseros rellenos de nata, los cuales fueron sumariamente engullidos sin juicio previo. Entre bocadito y bocadito, la habilidosa cocinera comentaba la receta con mi madre:
- Lo malo es que me ha sobrado un montón de nata.
- ¿Y cómo la vais a gastar si no es temporada de fresas?
La mitad de la buena cocina es tener imaginación. Mi madre hace croquetas.
Ayer vinieron a comer a casa mi hermano y su mujer. Como es su deliciosa y ejemplar costumbre, llegaron con el postre incorporado. Para la ocasión, mi cuñada se había esmerado en aportar al condumio unos suculentos buñuelos caseros rellenos de nata, los cuales fueron sumariamente engullidos sin juicio previo. Entre bocadito y bocadito, la habilidosa cocinera comentaba la receta con mi madre:
- Lo malo es que me ha sobrado un montón de nata.
- ¿Y cómo la vais a gastar si no es temporada de fresas?
La mitad de la buena cocina es tener imaginación. Mi madre hace croquetas.
9 comentarios:
Jijijiji
Eso, ¿cómo la van a gastar?
Croquetas de qué, explicate bien hombre:de jamón, de restos de cocidito, de bechamel, de bacalao ..........
Va a ser por eso que mi vida es taaaan sosa... porque yo también hago croquetas...
Estoooooooo mejor no le digais a vuestra madre los mil usos de la nata, aparte de para las fresas... O por lo menos los 898 que andaba yo pensando... uffffffffff, esperad el 899 no está nada mal, dejadlo ya Capi, por Dios que disparais mi imaginación, ainsssssss....
Besitosssss
La mía las compra congeladas...
¡¡¡¡¡Soy una niña probeta!!!!!!!
Guandarrrr:
Malditas fresas, ¡nunca están cuando se necesitan1
Alfor:
Mi hermano propone echarla en el café y añadir whisky.
Dentilla:
De cocido.
Reve:
Deja la sartén y coge la nata, ¡ya!
Esther:
El otro día alguien pensó lo mismo peor con sirope.
Eride:
¡Aberración! ¡Aberración!
- Hija, ¿por qué tienes un rotulador en la nevera?
- Porque la tinta es de chocolate.
- ¿Y para qué sirve?
- Para escribir.
- Ah...
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